Nervios que se agarran al estómago o diarrea por estrés
La ansiedad y el estrés son parte de la sociedad actual, desde hace unos 10 años, la vida habitual de las personas está marcadas por una sensación de no tener tiempo y vivir a un ritmo acelerado.
Los síntomas de la ansiedad se presentan de forma diferente según cada persona y pueden tener diferentes manifestaciones como son sensación de cansancio, nerviosismo, sudoración, temblores, ritmo cardiaco acelerado o alteración gastrointestinal.
Seguro que has escuchado eso de que “los nervios se agarran al estómago”. El intestino y el cerebro se relacionan estrechamente, de hecho, al intestino se le ha llamado en ocasiones el segundo cerebro. Esto puede ocurrir a consecuencia de que el sistema gastrointestinal tiene muchas terminaciones nerviosas y es una parte importante en el sistema nervioso junto al cerebro.
Al experimentar estrés, ansiedad o nervios, el organismo produce hormonas como la adrenalina que aceleran la función del sistema nervioso y la función muscular, por lo que al intensificarse el movimiento muscular puede acelerarse el ritmo de la digestión.
La microbiota intestinal también juega un importante papel pues cuando se altera, fundamentalmente por la mala alimentación, el abuso o el mal uso de antibióticos, el estrés, el sedentarismo, los hábitos tóxicos y la contaminación medioambiental, también puede producir diarrea.
Causas más frecuente de estrés
Ya hemos dicho que el ritmo de vida acelerado, sobre todo en las grandes ciudades, puede pasar factura y producir episodios de estrés. Dentro de las causas más frecuentes que pueden producir estrés encontramos:
- Factores económicos. La falta de poder adquisitivo o inestabilidad económica puede generar mucha presión y nerviosismo.
- Sobrecarga de trabajo. Es frecuente encontrar personas estresadas que tienen más carga laboral que la correspondiente.
- Falta de satisfacción laboral. El estrés puede estar asociado a la falta de valoración en el trabajo, no sentirse cómodo/a o inestabilidad por el miedo a perder el trabajo.
- Falta de tiempo libre. El ritmo de vida acelerado puede provocar tener que sacrificar parte del ocio, del tiempo en familia, con amigos o uno/a mismo/a.
- Buscar la perfección en un mercado laboral competitivo en el que se pretende destacar y también en la vida personal, sobre todo a causa de las redes sociales.
Causas más frecuentes de diarrea
Si bien la diarrea puede ser ocasionada por diferentes motivos, las causas más comunes son:
- Virus como la gripe, el norovirus o rotavirus. El rotavirus es la causa más común de diarrea aguda en niños.
- Por parásitos, pequeños organismos que se encuentran en alimentos o agua contaminados.
- Medicamentos como antibióticos o medicamentos contra el cáncer.
- Contaminación por la presencia de bacterias en alimentos o en agua
- Intolerancia y sensibilidad a ciertos alimentos como la intolerancia a la lactosa o el gluten.
- Enfermedades del estómago, el intestino delgado o el colon, como la enfermedad de Crohn
- Problemas en el funcionamiento del colon, como el Síndrome del Intestino Irritable
- La ansiedad y situaciones estresantes pueden ser causa de diarrea en algunas personas.
¿Cómo se trata el estrés?
No existe una fórmula mágica que sirva para resolver el estrés, lo importante es tratar de controlarlo y evitar y gestionar las situaciones que lo provocan.
Algunas de las cosas que pueden ayudar es realizar ejercicio de forma regular, algunas actividades como el yoga pueden resultar de gran ayuda; seguir una dieta variada y equilibrada; disfrutar del tiempo libre y con el entorno; buscar actividades o técnicas de relajación.
Si lo desea o si la situación se vuelve grave, puede buscar ayuda de un/a profesional.
¿Y la diarrea?
Es importante conocer qué está causando la diarrea, porque, aunque normalmente suele ser por causa leve que mejora en pocos días, en algunos casos puede implicar un riesgo mayor.
Algunas de las medidas recomendadas ante una diarrea son:
- Seguir una dieta de fácil digestión, evitando alimentos que sean ricos en grasas.
- Consumir probióticos que ayuden a restaurar la microbiota intestinal, de forma que pueda recuperarse la normalidad en los hábitos intestinales.
- Mantenerse hidratado/a, las diarreas implican un gran riesgo de deshidratación, sobre todo en personas mayores y en edad infantil. Por ello suele recomendarse algún suero o bebida que ayude a recuperar electrolitos, como por ejemplo Hidrasal®.
- En algunos casos también puede mandase medicamentos para tratar la diarrea.
Sería recomendable que un/a profesional de la salud valorase la diarrea, sobre todo si después de unos días no mejora.
Para evitar la diarrea por estrés o ansiedad, puedes seguir las recomendaciones que se han mencionado para ayudar reducir el estrés.