La Provenza en primavera, uno de los enclaves más importantes del sur de Francia
Si estás buscando un lugar que te deslumbre con su luz, sus aromas, colores, y donde puedas conectarte con la historia del arte y la naturaleza, lo único que necesitas es ir a Provenza en primavera. Este es uno de los lugares más importantes del sur de Francia, que te cautivará de igual forma que lo hizo con genios como Van Gogh, Cézanne y Picasso. Dicho esto, para disfrutar de un paisaje primaveral en todo su esplendor, solo deberás empacar tus maletas e ir en las últimas semanas de junio y primeras de julio.
Una explosión de colores y aromas en los campos de lavanda, son una experiencia única en la vida y que solo vivirás en Provenza en primavera. Para comenzar este hermoso recorrido te guiaré por los paisajes más espectaculares e inspiradores, estoy segura de que la próxima primavera la pasarás en esta tierra de ensueño.
Viajar a la Provenza en primavera, la conexión entre el arte, la historia y la naturaleza
Ponte cómoda, y disfruta de este artículo porque vamos a comenzar con este hermoso recorrido, quizás hasta puedas sentir el aroma de las flores sin necesidad de moverte de tu sillón.
Qué tal si, en primer lugar, justo al llegar a Provenza te diriges a Arles, aquella ciudad donde Van Gogh se dejó inspirar y vivió la época más fructífera de su vida, y en cuya región se instalaron los romanos mucho tiempo antes que los impresionistas. Por tal motivo, Arles tiene algunos de los mejores y más antiguos monumentos conservados como si el tiempo se hubiese detenido allí. Incluso dos mil años después de su construcción, el circo romano sigue acogiendo corridas de toros. ¡Impresionante!
Aunque Arles fue testigo de las 300 obras de Van Gogh, inspiradas en el paisaje provenzal, es sorprendente que no podrás apreciar ni una sola de sus originales. Sin embargo, puedes ser testigo de su motivo de inspiración, nada más y nada menos que toda la paleta de colores que se aprecian bajo los árboles del paseo de Les Alyscamps, frente al puente levadizo de Langlois y por todos los trigales y girasoles cerca a la carretera que cruza Les Alpilles.
Continuando el recorrido, está Les Baux de Provence, este hermoso pueblo es uno de los más visitados de Francia, ¿el motivo?, entre muchas festividades, allí podrás encontrar un castillo construido con la piedra extraída de una de sus canteras. Algo único y atractivo del lugar, pues allí en la actualidad estas se usan como murales en los cuales se proyectan obras de Van Gogh, Klimt y Gauguin.
Luego de apreciar una multitud de pequeñas poblaciones con ruinas romanas, paisajes de viñedos, cipreses y pinos, puedes hacer un relajado paseo por las calles adoquinadas de la Rue des Teinturiers o la Rue du Roi René, atravesando el famoso puente de la canción infantil mientras la luz del sol cae sobre el río.
La Provenza en primavera, un viaje para despertar los sentidos
No es de dudar que descubrirás muchos lugares encantadores, entre ellos, mientras te desplazas en carro o en bicicleta, encontrarás una comarca montañosa invadida por el púrpura y el aroma tranquilizador de la lavanda. Trata de que la fecha de tu viaje coincida con la época de floración, así podrás apreciar la infinidad de campos invadidos por el amarillo de los girasoles, los campos de cereal, el deslumbrante verde de las viñas, los olivos y los cipreses que te acompañarán en todos los caminos por los que pasarás.
Avanzando por la carretera D-25, la cual bordea el río Sorgue con todos sus molinos de agua, llegarás a la Fontaine-de-Vaucluse, este valle te permite escuchar el eco del agua por todas partes.
No podrás seguir tu recorrido por la Provenza sin encontrar algo más espectacular a cada momento, cada paso es un descubrimiento más impresionante que el anterior y que despertará todos tus sentidos. En la abadía de Sénanque, hallarás un gigantesco campo de lavanda cultivado por los monjes, que posteriormente convierten en jabón, miel o dulces de color violeta y aroma inigualable.
Tristemente todo tiene un final y no será la excepción para este encantador viaje, en el cual deberás pasar por Aix-en-Provence y buscar Cours Mirabeau para que te sumerjas en una elegante ciudad de los siglos XVII y XVIII. Allí, podrás relajarte con sus alamedas arboladas, todos sus mercados de fruta, decenas de cafés, librerías, floristerías y toda clase de fuentes. Viajar a la Provenza en primaveraes justo lo que necesitas para reconfortar el alma, darle alimento al espíritu y despertar todos tus sentidos.
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