Picor vaginal después del antibiótico ¿por qué?

¿Has notado picor vaginal después del antibiótico? Te aseguramos que no eres la única a la que le ha pasado y tranquila, que te contamos a continuación por qué ocurre y cómo evitarlo.

Generalmente, el picor vaginal tiene como origen una alteración de la microbiota vaginal. La microbiota vaginal es un ecosistema constituido por un conjunto de microorganismos vivos que cohabitan en equilibrio en el aparato ginecológico. Su equilibrio contribuye a mantener la salud de la zona íntima y cuando se altera ese equilibrio, cosa que es bastante fácil por cierto, puede desarrollarse infecciones vaginales.

Este complejo ecosistema está compuesto por más de 200 especies de bacterias diferentes en las que predomina el género Lactobacilos. En cuanto a las especies, las más frecuentes son L. crispatus, L. iners, L. jensenii y L. gasseri.

Los Lactobacilos suponen un importante mecanismo de defensa para la zona íntima, sobre todo porque una de las sustancias que producen, es el ácido láctico, que mantiene el pH vaginal en un nivel ácido, lo que impide el sobrecrecimiento del resto de las bacterias.

La microbiota vaginal es propia de cada persona, como el ADN, cada mujer tiene al suya propia. Además, va evolucionando y cambiando en función de la etapa de la vida en la que se encuentre la mujer (niñez, menstruación, embarazo, menopausia…)

En su composición también influyen factores medioambientales, la procedencia étnica o factores de conducta como las relaciones sexuales o la higiene íntima.

Como hemos dicho, alterar el equilibrio de la microbiota vaginal puede ser bastante fácil, cuando esto ocurre, se pierden lactobacilos y se altera el pH. De esta forma se dan unas condiciones óptimas para que algunos microorganismos pueden llegar a transformarse en patógenos y pueden desencadenarse algunas enfermedades como las infecciones vaginales, destacando la vaginosis bacteriana y la vulvovaginitis candidiásica.

¿Por qué se produce picor vaginal después del antibiótico?

Entre las causas más comunes por las que se produce picor vaginal encontramos las siguientes:

• Candidiasis vaginal
• Vaginosis bacteriana
• Menopausia
• Productos químicos
• Higiene íntima no adecuada

Se puede decir que todas estas causas tienen un denominador común que es la alteración del equilibrio de la microbiota vaginal, que debilita su función protectora.

Lo primero que debemos tener claro que no se produce la infección como efecto secundario del antibiótico, pero si este que puede generar un entorno favorable para que se produzca alguna infección vaginal.

Recordemos que la microbiota vaginal está compuesta principalmente por baterías, siendo estas el foco de actuación del antibiótico. Esto quiere decir que, cuando una persona toma un antibiótico por el motivo que sea, puede ver como su microbiota se altera, pues el antibiótico barre todas las bacterias, creando así un entorno favorable para el crecimiento de microorganismos patógenos que pueden dar lugar a infecciones.

A causa de esto, es muy común que se produzca una candidiasis después de tomar antibióticos, puesto que al reducirse la población bacteriana de la microbiota, los hongos que también forman parte de ese ecosistema, empiezan a crecer sin control dando lugar a una infección fúngica.

¿Cómo evitar las infecciones y el picor vaginal después del antibiótico?

Para esto, hay una palabra clave, PREVENCIÓN. Existen productos que actúan como coadyuvantes al tratamiento antibiótico, es decir, pueden tomarse de forma conjunta y que, además de ayudar a mejorar los síntomas, contribuyen al restablecimiento y mantenimiento de la microbiota vaginal.

Nuestra recomendación para estos casos es Actifemme® DÚO, el único tratamiento sinérgico que administra simultáneamente probióticos orales y vaginales, efectivo en prevención y como coadyuvante al tratamiento de infecciones vaginales de origen bacteriano y fúngico.

Recomendaciones para aliviar el picor vaginal

Si tienes picor vaginal y te gustaría como aliviarlo, están son algunos consejos que pueden ayudarte:

• Usar ropa interior de algodón, tratando de evitar los materiales sintéticos ya que dificultan la transpiración, favoreciendo así la aparición de hongos.
• Usar un gel íntimo adecuado a tu pH vaginal, como por ejemplo Actifemme® Íntimo.
• Evitar la ropa apretada, este tipo de prendas favorecen la irritación por el roce y además aumentan la temperatura de la vagina.
• Lavar la ropa interior con detergentes y suavizante adecuados,
• Usar preservativos durante las relaciones sexuales, para evitar el contagio de ETS y por cómo puede influir el pH de la pareja.
• Usar lubricantes en caso de notar sequedad y molestias durante las relaciones sexuales.

COMPRAR >