Escozor al orinar ¿Qué puede ser?
El escozor al orinar es una molestia muy frecuente y suele estar causado por un proceso infeccioso generalmente, aunque también puede ser por irritación.
Cuando la disuria o escozor al orinar es causado por una irritación, puede deberse a diferentes problemas que se generan en el área genital o tracto urinario como cálculos renales, enfermedades en las vías en las urinarias, irritación de la uretra por actividad sexual, frecuencia de actividades que ejerzan presión en la zona, cambios derivados de la menopausia o como efecto secundario de medicamentos.
Cuando el escozor al orinar es causado por infección, se desencadena por patógenos en las vías urinarias. Estos patógenos pueden tener diferentes procedencias: una Enfermedad de Transmisión Sexual; una alteración de la microbiota por bacterias de origen intestinal que han colonizado la uretra ocasionado por relaciones sexuales o mal uso del papel higiénico; o por el uso de productos que no respetan el pH perineal, lo alteran y producen un desequilibrio.
En mujeres, además, se puede tratar de una cistitis. La cistitis es la infección de orina o infección de vías bajas, en ella hay una colonización de bacterias en la orina, además de por procesos bacterianos, se puede producir también por infecciones por hongos, aunque la mayoría de las cistitis son originadas por la bacteria E. coli. Alrededor del 25 al 50% de todas las mujeres jóvenes sanas que sufren su primera infección de orina o cistitis, desarrollarán una segunda en un período de 6 meses. Las infecciones de transmisión sexual pueden dar lugar a uretritis, que produce también escozor al orinar.
Escozor al orinar como síntoma de cistitis
Entre los síntomas de las infecciones del tracto urinario en mujeres, encontramos los siguientes:
- Sensación de ardor o escozor al orinar
- Urgencia de orinar frecuentemente
- Sensación de no vaciar completamente la vejiga al miccionar
- Dolor y molestias al orinar
- Cambio de color en la orina, volviéndose más turbio u oscuro.
- También puede cambiar el olor, volviéndose más fuerte.
- Presión o calambres en la parte baja del abdomen (signo de posible alcance de los riñones)
- En los casos más graves, puede producir fiebre.
El embarazo o diabetes, son factores de riesgo, que favorecen el desencadenamiento de infecciones de orina.
Aunque son menos comunes, los hombres también pueden contraer infecciones urinarias. Los signos y síntomas de la infección de la vejiga (cistitis) en los hombres son los siguientes:
- Micción frecuente
- Necesidad intensa y persistente de orinar
- Sensación de ardor o escozor al orinar o inmediatamente después de orinar (disuria)
- Fiebre baja
- Orina de color turbio con olor fuerte
- Presencia de sangre en la orina (hematuria)
- Problemas para orinar, en especial si tienes un problema de próstata
El aumento del riesgo de infección en los hombres puede estar relacionado con lo siguiente:
- Hiperplasia prostática benigna (aumento del tamaño de la próstata)
- Cálculos renales
- Diabetes
- Estrechamiento anormal de la uretra (estenosis uretral)
- Uso reciente de catéter urinario
- Realización de algunos procedimientos o tratamientos médicos
En el caso de las infecciones del tracto urinario (ITUs), lo/as profesionales de la salud, suelen recomendar los antibióticos para tratar las cistitis, como, por ejemplo, la fosfomicina. Aunque se debe tener en cuenta que los antibióticos para tratar las cistitis pueden tener efectos secundarios, sobre todo, a causa de la alteración de la microbiota. Entre estas alternativas no farmacológicas podemos encontrar el arándano rojo, gracias a las proantocianidinas tipo A, que poseen propiedades antiinfecciosas y actúan sobre las bacterias que causan las cistitis, o la D-Manosa, con capacidad de atraer o atrapar la bacteria y arrastrarla hacia el exterior. Urocran Forte, con D-Manosa, probióticos y arándano rojo, ayuda a mejorar los síntomas de la cistitis, aliviando el escozor al orinar.
El cultivo de orina permite conocer qué germen produce la infección, entre ellos estarán las bacterias y entre estas la más común es la Escherichia coli, aunque también las Pseudomonas y Klebsiellas pueden ser frecuentes. Cuando realizamos un cultivo podemos tener un antibiograma que nos permite conocer qué antibiótico será el más eficaz o conocer qué hongo lo produce.
Para descartar la arenilla o bien el cálculo se realizará un sedimento con resultado anormal, pudiendo ver los cristales en la orina.