La flora intestinal y la ansiedad, una relación estrecha
Aún se discute si entre las emociones y la flora intestinal existe algún tipo de conexión o si influyen en las conductas. Sin embargo, muchos estudios confirman que cualquier desequilibrio de las bacterias intestinales afecta la respuesta del organismo ante situaciones como el estrés o la ansiedad.
De hecho, billones de bacterias que hacen vida en el intestino cumplen un rol importante en hacer funcionar nuestro cuerpo de forma adecuada. Si por alguna razón, la calidad de la flora del intestino es deficiente, puede ocasionar enfermedades como diarreas, alergias o colitis, entre otras muchas.
Estrategias dietéticas que favorecen la flora intestinal y las emociones
Como ya se ha mencionado, todavía se investiga hasta qué grado el microbiota intestinal afecta nuestras emociones, nuestra conducta o nuestro comportamiento y viceversa. Los resultados de los estudios están siendo determinantes para evitar no solo los daños físicos, sino también los trastornos psicológicos relacionados.
Gracias a ello, hoy es posible aliviar la ansiedad y a su vez cuidar la flora intestinal mediante aliados dietéticos como los alimentos probióticos. Estos alimentos, como las leches fermentadas o los yogures, abundan en bacterias saludables que benefician la actividad intestinal. Y no solo eso. También influyen positivamente en la conducta.
Por cierto, en un estudio que se llevó a cabo y se reseña en “Las maravillas del microbiota”, se combinaron bifidobacterium y lactobacillus (probióticos), para observar sus efectos en ciertos animales, y después en humanos.
En los animales, la conducta ansiosa se redujo, mientras que en humanos las sensaciones psicológicas disminuyeron considerablemente.
Por ello, algunos expertos ya utilizan la expresión “psicobiótico” para referirse a la combinación entre un probiótico y un psicotrópico, debido a la influencia que ejerce este, tanto en el colon como en algunas sustancias que alteran al cerebro.
Son, en efecto, drogas neuroquímicas naturales que equilibran trastornos mentales o emocionales.
De ahí la importancia de añadir a la ingesta diaria cantidades adecuadas de alimentos probióticos, así como de complementos probióticos alimenticios, que incrementan la calidad de la flora intestinal y generan sustancias químicas como la serotonina, implicada en regular los estados de ánimo por sus efectos antidepresivos y ansiolíticos.
Controlar el estrés y la ansiedad favorece la salud intestinal
El estrés prolongado produce, entre otros factores, candidiasis en el intestino, una enfermedad habitual en personas que no logran controlar su ansiedad y, por tanto, se extralimitan al comer y beber.
Los malos hábitos alimenticios están asociados a fermentaciones, diarreas, malas digestiones, altos niveles de glucosa, además de otro tipo de trastornos que debilitan el sistema inmunitario.
Combatir de forma eficaz la candidiasis intestinal requiere seguir una serie de recomendaciones que permiten controlar y eliminar cualquier alteración al respecto. Descuidarse en este sentido puede ocasionar candidiasis recurrente o crónica, lo que agravaría aún más los síntomas.
Aquí algunos consejos básicos a seguir:
- Es importante no automedicarse ni someterse a ningún régimen que haya sido recomendado por alguien que no sea especialista en trastornos del organismo.
- Consumir alimentos que contengan vitaminas, minerales y antioxidantes, muy beneficiosos en casos como estos.
- Disminuir la ingesta de alimentos de origen animal.
- Añadir a la dieta alimentos ricos en nutrientes alcalinos y desintoxicantes.
- Incluir al régimen dietético alimentos con alto contenido de omega 3, zinc, selenio, vitaminas A, C y E, entre otros. Lo ideal es seguir este plan nutricional por lo menos durante tres meses, siempre bajo la supervisión y asesoría de un nutricionista.
- Evitar los excesos a la hora de comer y beber. Cualquier tratamiento prescrito resulta deficiente si no se cambia el estilo de vida, así como los hábitos alimenticios.
Para reforzar todavía más al organismo es preferible consumir productos o complementos alimenticios que combinen probióticos y prebióticos como Vitaplus®, la nueva marca especializada en probióticos avanzados y especializados en tratamientos como la diarrea, el síndrome de intestino irritable, etc.
Esta nueva fórmula protege el tracto gastrointestinal de posibles agentes patógenos.
En cualquier caso, la clave para disfrutar de un estilo de vida más relajado y saludable, no solo en sentido físico, sino también emocional, depende mucho de la calidad del microbiota intestinal, por eso conviene cuidar la función gastrointestinal.
Recientes investigaciones confirman cada vez más la relación existente entre la flora intestinal y la ansiedad.
Por ejemplo, gracias a la ciencia, se ha descubierto una importante red neuronal (sistema nervioso entérico), un segundo cerebro, por así decirlo. Tales neuronas son capaces de producir serotonina en grandes cantidades.
Con razón los probióticos, los prebióticos o el carbonato de magnesio resultan grandes aliados de la salud intestinal.