El cuerpo humano se compone en un 60% agua y el cerebro puede contener un 75% aproximadamente, de ahí que la hidratación en los seres humanos sea indispensable para vivir. Y es que precisamente este importante líquido contribuye en gran medida a que las funciones cerebrales se desarrollen de forma normal.

La cognición tiene que ver con todo lo que se refiere a pensar, memorizar, percibir y sentir, las cuales son funciones que con el paso de los años y como producto del envejecimiento suelen disminuir su rendimiento. De esta manera se evidencia la importancia de que las personas mayores dispongan de una hidratación constante que les permita mantener activas sus principales funciones cerebrales.

¿Cómo aumentar los niveles de hidratación en ancianos?

La sensación de sed en los mayores disminuye de forma considerable, lo cual genera que en muchas ocasiones los ancianos presenten altos niveles de deshidratación, afectando de forma considerable su salud, así como las funciones cognitivas y hasta el estado de ánimo. Por eso es muy común ver en personas de edad avanzada, algunos vacíos mentales, falta de coordinación considerable y reducción de la habilidad espacial y perceptiva.

De ahí que sea necesario mantener una hidratación constante en los ancianos para evitar estos problemas cognitivos. Sin embargo, en la actualidad se han creado algunas elaboraciones como Hidrasal, el cual es un producto elaborado principalmente para añadirle un aporte mineral y una hidratación óptima al cuerpo.

Esta opción nutricional es verdaderamente excepcional no solo por sus propiedades destinadas al aporte de agua y sales minerales al organismo, sino que aparte viene en dos presentaciones, con los extraordinarios sabores a fresa y limón, lo cual permitirá que las personas puedan consumirlo dejando un buen sabor de boca.

¿Por qué es común que los ancianos no sientan sed?

Una de las principales razones que disminuye la sensación de consumir agua en los mayores, es que se atrofia el centro de la sed. Es un trastorno que se conoce como hipodipsia y está relacionada directamente con una disminución de la neurona que produce la sed, la cual está situada en el hipotálamo.

Es así como los ancianos presumen que no necesitan consumir líquidos, resultando que ya gran parte del cuerpo se encuentra deshidratado, lo cual genera de inmediato factores negativos en el funcionamiento normal del organismo.

En este sentido es importante que en el hogar se busquen los mecanismos para mantener hidratados a los mayores, mediante el consumo de zumos, bebidas energizantes o complementos alimenticios que le aporten un mayor nivel de agua al cuerpo.

De esta manera los especialistas recomiendan que lo familiares suministren a los ancianos la dosis correcta de agua durante el día. En el caso de las mujeres el rango recomendado son dos litros diarios, mientras que en el hombre son dos litros y medio, los cuales pueden integrarse mediante el consumo de consomés, sopas, leches y bebidas.

Sin duda, una deshidratación ligera puede pasar hasta desapercibida en el anciano y estar ocasionando múltiples daños cerebrales, por lo cual es importante garantizar a los mayores los niveles de agua recomendados, y precisamente un producto desarrollado para tal fin puede ser un excelente aliado para hidratar el cuerpo.