¿Este año también hay síndrome postvacacional?
Ha llegado septiembre, el mes en el que se termina el verano, la jornada intensiva, las vacaciones y nos toca volver a la rutina. ¿Y qué aparece también en septiembre? El síndrome postvacacional.
El síndrome postvacacional se considera con una sensación de tristeza, desgana, falta de energía y poca motivación por incorporarse de nuevo al trabajo y reactivar la rutina diaria después del periodo de vacaciones. Suele durar unos días, aunque a algunos se les puede alargar durante semanas.
Las personas que sufren síndrome postvacacional asocian sus síntomas al estrés. Se trata de un malestar físico y emocional a la hora de recuperar las obligaciones diarias. La rutina se echa encima y no sentimos la capacidad de responder a todas las tareas habituales, principalmente las asociadas al entorno laboral, por ello se dice que suele ser más frecuente en trabajadores que se sienten descontentos con su puesto de trabajo, no se sienten realizados y lo ven como una obligación.
Los síntomas que caracterizan al síndrome postvacacional suelen depender de la persona en la que se presenten, variando el tipo y la intensidad, aunque como comentamos al principio, suele asemejarse a un periodo de estrés o ansiedad.
Lo común en estos casos es no encontrarse con humor suficiente, sentir ansiedad, apatía tristeza. Sentirse decaído/a y notar falta de energía, la desmotivación también es otro “síntoma” al igual que la sensación de cansancio y la dificultad para concentrarse en las tareas.
¿Te sientes así? ¿Qué puedes hacer?
La mejor forma de combatir al síndrome postvacacional es prevenirlo y evitar que se desencadene, ¿cómo hacerlo? A continuación, vamos a darte algunas pautas que puede seguir:
- Si te vas de viaje o pasas unos días fuera de tu residencia habitual es muy importante no regresar de las vacaciones directamente al trabajo, lo recomendable es reservar los últimos días para volver a casa tranquila y relajadamente.
- Además de físicamente, hay que tratar de prepararse mentalmente para la vuelta al entorno laboral.
- Intenta también seguir el horario laboral, por ejemplo, levantándote a la hora habitual para ir al trabajo, esto ayudará a que no te cueste tanto el primer día ni te suponga un esfuerzo grandísimo.
- Al igual, es recomendable reanudar las actividades extralaborales, como por ejemplo reactivar la rutina deportiva y adaptarlas a tu horario habitual.
- Se recomienda no coger más de 2 semanas seguidas de vacaciones para no acostumbrarse, pues se supone cuando se realiza una actividad durante 21 días, se vuelve rutina y por lo tanto será más difícil salir de ella.
- Darse tiempo, esta es otra de las cosas más importantes que podemos hacer, tener paciencia y tomárselo con calma.
Hemos hablado de la prevención del síndrome postvacacional, pero ¿qué podemos hacer si lo estamos sufriendo? Existen algunas recomendaciones que podemos seguir y que ayudarán a adaptarnos al regreso de las vacaciones y vuelta al trabajo:
- No llevarse trabajo a casa.
- Descansar lo suficiente, intentar dormir entre unas 7 – 8 horas al día.
- Mantener y respetar horarios regulares para realizar rutinas diarias.
- En el trabajo, intenta realizar las tareas que más te gusten o te resulten más fáciles primero.
- En los descansos intenta relajarte y hacer alguna actividad agradable, puedes hablar con tus compañero/as o con algún familiar.
- Busca alguna actividad que te ayude a relajarte y te resulte agradable para practicar en tu tiempo libre, como leer, el yoga o hacer puzles.
¿Este año existe el síndrome postvacacional?
A pesar de la situación actual con la COVID-19, la vuelta a la rutina laboral puede ser igual de costosa para algunos.
Es cierto que este año las vacaciones han sido diferentes, con menos viajes y mucho más tranquilas, pero eso no implica que no cueste recuperar la rutina. Es probable que para aquellas personas que estén realizando teletrabajo les resulte menor el cambio y no sea tan brusco.
Sin embargo, para aquellas que tengan que reincorporarse al lugar habitual de trabajo, sobre todo si han estado haciendo teletrabajo hasta ahora, puede que el cambio sea aún más difícil, pues se le suma la incertidumbre y tensión que supone volver al trabajo en medio de esta crisis sanitaria generando un mayor nivel de ansiedad.
En estos casos es recomendable hablar cobre ello, puedes hacerlo con tu familia, amigo/as o con tus compañeros de trabajo. Por otro lado, empresa debería facilitar la comunicación interna y hacer sentir seguro al trabajador.
En conclusión, podemos decir que se trata de recuperar la rutina poco a poco, dándonos tiempo para adaptarnos y recuperando el ritmo progresivamente, sin que la vuelta al trabajo suponga un cambio muy brusco. Se debe tener un poco más de cuidado y ser más responsable, pero con calma y paciencia se recuperará la rutina.